Jet lag o descompensación horaria

Definición

El Jet lag, o también conocido como descompensación horaria, disritmia circadiana o síndrome de los husos horarios, es un desequilibrio producido entre el reloj interno de una persona (que marca los períodos de sueño y vigilia) y el nuevo horario que se establece al viajar en avión largas distancias, a través de varias regiones horarias.

El reloj interno de la persona tiende a prevalecer, por lo que, al viajar al este, no tendrá sueño cuando haya llegado la noche y, en el caso de viajes al oeste, tendrá sueño en pleno día.

Entre los posibles síntomas provocados por el jet lag se encuentran:

* Fatiga, cansancio general que es el más frecuente.

* Problemas digestivos - vómitos y diarreas

* Confusión en la toma de decisiones o al hablar

* Falta de memoria

* Irritabilidad

* Apatía

Quienes estén sometidos a tratamientos que requieran la administración de medicación según un horario, deben considerar la necesidad de modificarlos según prescripción facultativa para compensar la disritmia circadiana; así, puede ser necesario modificar la dosis y el momento de administración de insulina dependiendo del número de zonas horarias atravesadas, el tiempo de permanencia en cada destino, la alimentación y la actividad, por lo que se debe determinar el nivel de glicemia con frecuencia. Los regímenes pueden requerir modificación en función del tiempo ahorrado en lugar del tiempo local.



Estrategias para evitar el Jet lag

* Dormir bien antes de empezar su viaje.
* Evita las bebidas alcohólicas y la cafeína
* Beber mucho agua
* Intentar dormir durante el viaje
* Comer muchas veces y poca cantidad. Si puede llevar fruta y/o verduras frescas, tomar estos en vez de la comida que le sirvan en el avión
* Llevar ropa cómoda. Evita las prendas que aprietan demasiado
* Intentar pasear por el avión
* Usar gafas de sol, así engañaremos a nuestro reloj interno


Cómo dormir mejor durante el vuelo

* Si va a viajar del este hacia el oeste, intenta madrugar lo máximo posible durante las dos noches antes de su salida. Esto facilitará su adaptación al horario de su lugar de destino
* Una vez en el avión, intentar dormir de acuerdo con el horario que le espera a su llegada
* Llevar tapones para los oídos así como un antifaz para los ojos (algunas compañías aéreas los facilitan)
* Utilizar una almohada para facilitar el descanso. En las farmacias se pueden comprar almohadas especiales que se adaptan al cuello durante los viajes y facilitan el descanso


Cómo adaptarse mejor a la nueva franja horaria

El reloj corporal de un viajero que sufre de jetlag necesita tiempo - desde unos días hasta unas semanas dependiendo de la persona - para adaptarse al nuevo entorno y el nuevo horario. Aquí hay algunas ideas para facilitar esta adaptación:
* Salir a la calle para que la luz del sol entre en su cuerpo y ayude a reprogramar su reloj corporal
* Cuánto antes se adapte al nuevo horario mejor. Toma algo de café o té durante el día para mantenerse y luego acostarse a una hora temprana según la hora de su destino
* En otras secciones hemos insistido sobre la importancia de seguir una rutina a la hora de acostarse. Procura mantener esta rutina durante su estancia
* Utilizar técnicas de relajación
* Hay estudios que sugieren que un ejercicio intenso por la mañana temprano el primer día tras un desfase horario puede acelerar la adaptación al nuevo horario mejor que tratamientos de luz o de melatonina.


Alcohol y medicamentos

Algunos viajeros utilizan remedios como el alcohol o los medicamentos tipo somníferos. No se recomienda este tipo de remedio siempre y cuando no se le haya aconsejado su médico. Algunas personas creen que el alcohol ayuda a dormir y lo toman durante el vuelo. Esto es un error, ya que además de deshidratarse más todavía, el alcohol afecta de forma negativa los ciclos del sueño y a la larga puede prolongar las síntomas del jetlag.